
Aunque ya en la posguerra y reformado para el servicio con los bomberos voluntarios de Maria Lanzendorf en Austria, la foto superior es probablemente la mejor que existe de uno de nuestros amigos. De este extraño híbrido se fabricaron no menos de 7.000 unidades de los que tan sólo hace unos años se localizó un maltrecho superviviente en Noruega. Son camiones realmente difíciles de ver en fotos de la época, de las que hasta ahora sólo se conocían 4 ó 5... hasta ahora. El caso es que hace un par de años apareció en eBay una pequeña serie de fotos tomadas en el verano del 45 en un campo de prisioneros alemanes. Aparecían vehículos bastante interesantes y uno en particular, repintado con los colores de la Cruz Roja, me llamó la atención desde el primer momento.... "esto... esto... esto es un Ford con cabina Amberes!!!". Allí estaba, tan huidizo como en las fotos conocidas hasta entonces. No perdí oportunidad, nadie en la puja por las fotos se dió cuenta de cuán raro y excepcional era aquel camioncito blanco, y por unos pocos euros (cosa más rara aún) está ahora en mi álbum.

La cabina Amberes es de formas más redondas y suaves que la Ford original, pero si hay problema en identificarla sólo hay que fijarse en dos detalles típicos. El primero, la forma de la moldura entre la cabina y el morro, que aparece "mordida" por su parte superior y que "sube" desde la puerta hasta el motor. Y dos, la maneta de la puerta, que se encuentra debajo de su moldura, cuando en la cabina Ford se sitúa en la misma.

Ahora, a repasar fotos... de momento he localizado dos más.